martes, 18 de octubre de 2016

Mamoru, el protector


Su madre humana describe de este modo la llegada de Mamoru al hogar: 

“Un día, escuché un ruido en la puerta principal del apartamento. Abrí y un gato enorme, de colores blanco y negro brillante, entró a mi casa con toda la confianza del mundo, como si siempre hubiera vivido ahí. A partir de ese momento, el gato, a quien llamamos Mamoru, se quedó a vivir con nosotros”. 


Su nombre significa “proteger” en japonés y el gato se convirtió rápidamente en el hermano mayor de Nuku-Nuku, Ace y Lara. Cuando alguna de ellas se escapaba del apartamento, en especial Nuku-Nuku, Mamoru la seguía y la hacía regresar a la casa. A pesar de su gran tamaño que sorprendía a todos, era un gato juguetón y bastante cobarde. 

Una vez, mientras estaba escondido en un rincón oscuro del edificio, un gato arrabalero se acercó a desafiarlo, pero el buscapleitos huyó despavorido al apreciar el verdadero tamaño de Mamoru, que salió de su escondite temblando de miedo, por cierto. 

Murió por complicaciones de una cirugía de cálculos renales en 2004 y aparece como “El Protector”, en el cuento “¡Se cayó la luna!”.

 Si desea leer este relato, lo puede encontrar en el libro Gatohólicos Anónimos.

1 comentario:

  1. Que duro es perder un gato, pero queda la satisfacción de que tuvo mucho amor

    ResponderBorrar